Nuevos dictadores
Nueva York.- Las dos primeras décadas del Siglo XXI se conocerán como la Era Dorada de las estafas bancarias. En los últimos años los banqueros se robaron el sueño americano y las casas con la gente dentro. Desaparecieron fondos de pensiones de los envejecientes y se robaron el futuro de la juventud, hipotecándola con créditos educativos impagables. Empujaron el sistema financiero por un barranco y le quitaron trillones de dólares al contribuyente para “rescatarlos” de la bancarrota. En el proceso eliminaron los empleos y medios de vida para millones de personas.
Y nada les ha pasado.
El último escándalo bancario: Barclays, el gran banco londinense, junto a otros gigantes financieros británicos, admiten estar manipulando el costo del dinero. Sucede que cada día los grandes bancos londineses someten el estimado de lo que debe ser la tasa de interés para los préstamos interbancarios. London Inter Bank Offered Rate (LIBOR). Barclays, USB y otros admiten haber manipulado esa tasa durante años. Las tasas de interés de los préstamos y tarjetas de crédito del mundo se fijan con LIBOR como referencia. Cuando manipularon ese indicador para beneficio de los banqueros, todos fuimos estafados.
Aquí los políticos tienen una oportunidad única para imponer serias regulaciones bancarias, pero no lo harán. Ahora simularán estar enojados con los banqueros y demandarán que los reguladores tomen medidas “drásticas” en la supervisión del sistema bancario. Iniciarán hasta investigaciones criminales, según reportó The New York Times, pero nadie debe esperar banqueros presos. Porque los banqueros financian las campañas de los políticos que designan a los reguladores bancarios. Esto será un gran espectáculo. Quizá sea capitalizado en favor del Presidente Barack Obama, pero esto no pasará de un regaño y una multa. Los banqueros disfrutan hoy de la misma impunidad que ayer estuvo reservada a los dictadores.
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